Resonancias en la NEL-Delegación La Habana a partir del discurso de la Presidenta entrante Raquel Cors Ulloa (Gestión 2021-2023).

Hace aproximadamente dos meses tuvo lugar el Acto de Asunción de la Gestión 2021-2023 de la Nueva Escuela Lacaniana (NEL). Miembros y asociados de las distintas sedes, delegaciones y grupos asociados nos reunimos una vez más a través de Zoom para el acontecimiento de Escuela que sucede cada dos años y va marcando giros singulares en cada gestión. El discurso de Raquel Cors como presidenta entrante dejó algunas resonancias en nuestra delegación, las cuales publicamos seguidamente.

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Resonancias de una re-apertura

por Mariela Rodríguez Méndez (Miembro de la NEL-Delegación La Habana)

Retomar el fracaso, como recurso de la investigación en psicoanálisis, es la mayor resonancia que tuvo en mí ese discurso. “Fracaso” me parece otro modo, entre tantos, de nombrar lo real: lo que insiste, lo que no marcha, lo indomable, clave del malestar en la cultura.

Si el principio fundamental del psicoanálisis es no ceder ante lo real en juego, habrá que localizar ese real que persiste en nuestras curas y nuestros modos posibles de hacer existir el psicoanálisis. No ceder es clave en el asunto porque es una invitación al trabajo bajo transferencia, consintiendo a la interpretación del inconsciente, el analista, la Escuela para algo lúcido dar (Elucidar) como acto de amor lacaniano de quien da lo que no tiene a quien no es.

Cuestión política porque no se trataría jamás de la cínica aceptación del fracaso con las manos cruzadas, ni de los ideales o triunfalismos enfatuados. Más bien, construir un síntoma a partir de la localización del fracaso, para emprender un trabajo analítico en el análisis personal, en la práctica clínica, el control, la Escuela.

“La política del síntoma nos convoca a tomar partido más allá de las identificaciones y más acá de un esfuerzo de poesía (…) “un esfuerzo por decir lo inefable. Por fortuna el psicoanálisis, (…) consiente a dejarse enseñar para finalmente saber-hacer-con el poema encarnado que cada analista es. Porque un analista no es un poeta, sino un poema producto de la poesía de su ICS”. (Cors Ulloa, 2021, párrafos 10 y 11)

Se trata sí, de dejarnos enseñar por las consecuencias de nuestros actos, cuando se puede dar cuenta de que lo real fue tocado y cuando este insiste y fracasamos. Se puede fracasar de la buena y de la mala manera. La distinción a mi modo de ver, estará dada por el modo de bordear el agujero que representa la no relación sexual en nuestra práctica en intención y extensión. He ahí, un recorrido posible del síntoma al sinthome. Y mientras la disposición analizante: ¡Al trabajo!

“Para esta gestión, animada por el deseo de saber, por los efectos interpretativos, por los productos del órgano base de la Escuela, nuestras elaboraciones espistémicas, clínicas y políticas serán nuestros temas de debate, ojalá ágiles, flexibles, sueltos de interminables teorizaciones”. (Cors Ulloa, 2021, párrafo 22)

Ojalá con la agilidad, flexibilidad y agudeza de la enunciación nacida de la elucidación analítica, con los restos del saber que el trabajo permite. Sin embargo, nada nos salva en el proceso, de momentos de interminables teorizaciones: otro de los rostros del fracaso, de lo real que insiste. Oportunidad para relanzar el trabajo. Ojalá en lazo, bajo transferencia, no sin la soledad responsable del trabajador decidido.

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Comentarios sobre el discurso Raquel Cors

por Maritza Bernia (Miembro de la NEL-Delegación La Habana)

En su discurso como actual presidenta de la NEL, me interesa destacar la lógica de abordar la renovación de la escuela, al rescate de lo funcional pensando en la época, así como los nuevos modos de lazo y amor. Por otra parte, de qué manera articular lo Uno y lo múltiple en una Escuela mediante ese lazo de transferencia de trabajo.

Un punto de inscripción de la Escuela como sujeto, marca que permite relanzar nuevos modos de trabajo y ubicar ahí justo en este punto el lugar de la causa.

Lo real como referencial tanto en el amor como en los síntomas, vivificado y causado en el trabajo de Escuela.

La escritura en el ciframiento de un goce y de un saber —como lo cita Cors— en tanto expuesto, no supuesto.

Un movimiento de trabajo en la Escuela a contrasentido de lo grupal, segregativo, que sabemos qué efectos produce, rotura de un encuadre donde la causa tiene su lugar y la negación de ese no-todo que genera un movimiento y una vivificación de goce desde lo singular hacia lo múltiple.

Destaco en el discurso de Raquel el surgimiento de la Escuela como sujeto de derecho, solo así podrá ser funcional, vivo. Servirnos de la "arcilla" para continuar sosteniendo la causa analítica.

Desde ese espacio vacío de la causa arranca la renovación y recomienzo de esa página en blanco donde "cada uno de nosotros está convocado a poner su letra…". Inscribir lo singular para hacer lazo con la Escuela. Diversidad de singularidades. No estar en soledad, siempre.

Un discurso que sostiene lo real como referencia, pauta de la práctica analítica y su acto, sin desestimar los nuevos modos de goce de la época.

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Resonancias del discurso de Raquel Cors

por Yanet Morejón Hernández (Asociada de la NEL-Delegación La Habana)

El discurso de Raquel Cors como presidenta entrante de la gestión de la NEL 2021-2023 me dejó la sensación de una convocatoria al trabajo de Escuela, siempre desde lo que a una le anima. Hay más de un significante que orienta y debe ser tenido en cuenta en nuestra práctica clínica.

Mutatis mutandis, el título que Raquel da a su discurso resulta un adecuado tránsito de una gestión a otra, en la que se cambiará lo que sea necesario cambiar, significado de esta frase en latín. Hay un resto siempre, como también hay movimientos y considero que uno importante en esta transición ha sido la inscripción de la NEL.

Quisiera que sus consecuencias tuvieran efectos en la propia NEL, en sus sedes, delegaciones y grupos asociados, pero especialmente en la Delegación La Habana, aun cuando haya un hystorial de trabajo que no ha requerido ser inscrito para un Otro (Estado, Salud, etc.) en Cuba.

Dos orientaciones precisas: “…mantener la atención flotante” y orientarse “…por el nudo inaugural de la transferencia, incluso negativa”. Esto me remite a la política de la Escuela y a una posición ética. Orientarse por la transferencia, y dijera, sobre todo, la negativa da lugar a la posibilidad de sostener lazos de trabajo enseñante, no solo dentro de la Escuela, sino también con otras instituciones no necesariamente de orientación lacaniana. Lo cual siempre ha sido una pregunta que me divide por la insistencia en encontrar vías posibles para la transmisión en extensión. ¿Cómo hacer pasar algo de la posición analizante en contextos institucionales de cualquier tipo?

Alojar la diversidad del Hay Uno en la Escuela no sería posible si no fuera por la transferencia (al psicoanálisis, al inconsciente, de trabajo). En algún momento de su discurso, Raquel se disculpa si se dejan entrever en sus palabras algunos restos testimoniales. Si bien no habría que disculparse por ello, esto enseña justamente lo que aloja la Escuela, la poesía del inconsciente que cada parletre hilvana a su modo, desde su singularidad y con lo cual se hace un lugar.

¿Cuánto de esto pudiera confundirse con la permisividad, con el para todos? ¿Qué implica alojar la diversidad? No creo que sea alojar a todos, mucho menos que la Escuela sea para todos.

A mi modo de ver, hacerse un lugar en lazo con la Escuela permite verificar cada vez un deseo de trabajo decidido del que sólo puede dar cuenta quien se presta a transmitir, quien presta su cuerpo a los efectos de una transmisión, bajo transferencia. Cosa nada fácil. Tomar la palabra o dejarse tomar por la palabra que tiene efectos, y estar dispuesta a trabajarlo en análisis, es un desafío en cada momento. De ahí que no haya un para todos, habría en todo caso muchos Unos con saberes singulares, enseñantes, no-todos. En este sentido la diversidad que acoge la Escuela anima a otros a encontrar su propio deseo vivo.